SEGUIR ESPERANDO ? O NO ESPERAR?

No esperés una sonrisa para ser gentil y ser amado para amar.
No esperés estar solo para reconocer el inmenso valor de un amigo.
No esperés el luto del mañana para reconocer la importancia de quienes están hoy en tu vida.
No esperés tener el mejor de los empleos para ponerte a trabajar.
No esperés la nostalgia del otoño para recordar un consejo.
No esperés la enfermedad para reconocer qué tan frágil es la vida.
No esperés a la persona perfecta para entonces enamorarte.
No esperés el dolor, para pedir perdón.
No esperés la separación para buscar la reconciliación.
No esperés elogios para creer en ti mismo.
No esperés que los demás tomen la iniciativa, cuando sabes que te mueres de ganas de un abrazo, una caricia o un beso.
No podemos esperar, el momento es hoy. Y hoy significa ahora, este nuevo día que comienza.
No vivamos esperando de los demás. Empecemos a ser protagonistas. Es nuestra vida, es nuestro presente. Aquí y ahora.
Debemos aprender a amar, a dar desinteresadamente, a sentir, a perdonar, a concederle valor a nuestras pequeñas cosas, a nuestros amigos, a nuestro trabajo, a nuestra vida de todos los días. Muchas personas viven esperando y en esa espera se olvidan que aquellos que dan sin esperar son los que reciben a manos llenas. (anonimo)


Cuando  hacemos posible el  conocer  al  otro  es  cuando  vemos  que necesitamos del otro, pero mas  aun , cuando  se  queda  esperando sabe que un dia  de aquellos  llegara  el momento,  sin saber que  ese  dia  es  tan  largo y cada minuto que  pasa  la  espera  se convierte  en un  desesperar.

Aunque la visión tardará aún por un tiempo, mas se apresura hacia el fin, y no mentirá; aunque tardare, espéralo, porque sin duda vendrá, no tardará”.
 

Todos hemos pasado momentos de espera, de una u otra manera hemos pedido algo a Dios y esa respuesta en muchas ocasiones ha tardado, no porque Dios tarde para responder, sino porque el sabe el tiempo indicado o mejor dicho perfecto para contestar.

Posiblemente en algún momento de tu vida has sentido como Dios te dio una amplia visión de lo que haría contigo o lo que haría en tu vida. Quizá ya paso un buen lapso de tiempo y aun no vez como esa visión se hace realidad.

A mi me gusta ser soñador, de hecho soy un soñador de primera, paso mucho tiempo pensando en realizar muchas cosas que anhelo, ha habido momento en donde esos sueños parecieran que son ya una realidad de tantas veces que los he soñado, pero en medio de todo eso he aprendido a saber esperar.

Cada  uno  de los  encuentros mas  bellos  que las personas podemos imaginas  es el aprender a  aceptar las cosas  aunque  sean dolorosas,  no es posible  a veces  aceptar  ciertas  situaciones, pero  ahi es  cuando uno  debe  aprender a  resignarce y  renunciar.